La Encarna (Cuplé) Popular La Encarna, y soy y me llamo, y en San Cayetano se me bautizó. Madrileña, soy de Madrid, pues en los madriles nací, tengo la bajeza de los chisperos, de rompe y rasga. Me gusta, que un hombre me diga, con mucho cariño palabras de amor. Que esas palabritas mi bién, pruebas son quizá de un querer, palabritas que hacen pensar, a la mujer al recordarlas luego. Son soy la modista de calles y plazas, con su taconeo murmullos levanto. Voy a Capellanes a bailar, luego voy a Boco a merendar, y cuando hay pesares, yo soy la primerita en consolar Por las noches voy a la infantil, ceno luego en casa de Potín, que yo soy chulapa y no madam de Cachupín. En fiestas yo soy la primera, en las formaciones y en la procesión. Y me dicen todos a mi, yo me moriría por ti, y orgullosa miro yo asi por no decir, eso ya lo sabía. La madrileña de pies chiquititos, ojos de sultana, dientes de marfil. Que siempre fue alegre y desenvuelta, sin saber que pena su vida es reir. La madrileña quereres no olvida, pues cuando ella quiere quiere on pasión. Y los recuerdos de amores de un dia, ella siempre guarda en un rinconcito de su corazón. Ay!, bendita tierra donde parecen, to'as las mujeres granos de sal. Es la tierra mía, tierra de alegría, por el mismo cielo yo no he de cambiar. La más alegre de España es mi tierra, la más alegre fue siempre Madrid.