Popurri de Valses Orquesta Santiago Déjame que te cuente, limeña Déjame que te diga la gloria Del ensueño que evoca la memoria Del viejo puente, del río y la alameda Déjame que te cuente, limeña Ahora que aún perfuma el recuerdo Ahora que aún se mece en su sueño El viejo puente del río y la alameda Jazmines en el pelo y rosas en la cara Airosa caminaba la flor de la canela. Derramaba lisura y a su paso dejaba Aroma de mixtura que en el pecho llevaba Del puente a la alameda Mundo pie la lleva Por la vereda que se estremece Al ritmo de sus caderas Recogía la risa de la brisa del río Y al viento la lanzaba Del puente a la alameda. De la Sierra Morena, Cielito lindo, vienen bajando Un par de ojitos negros, Cielito lindo, de contrabando. Ese lunar que tienes, Cielito lindo, junto a la boca, No se lo des a nadie, Cielito lindo que a mi me toca. Ay, ay, ay, ay, Canta y no llores, Porque cantando se alegran, cielito lindo, los corazones. Ay, ay, ay, ay, Canta y no llores, Porque cantando se alegran, Cielito lindo, los corazones. Es inutil dejar de quererte. Ya no puedo vivir sin tu amor No me digas que voy a perderte No me quieras matar corazon Yo que diera por no recordarte Yo que diera por no ser de ti Pero el dia que te dije te quiero Te di mi cariño, y no supe de mi Corazón, corazón. No me quieras matar corazón. Recuerdo aquella vez que yo te conocí, recuerdo aquella tarde pero no me acuerdo ni como te ví. Pero sí te diré que yo me enamoré de esos tus lindos ojos y tus labios rojos que no olvidaré. Pero sí te diré que yo me enamoré de esos tus lindos ojos y tus labios rojos que no olvidaré. Oye esta canción que lleva alma, corazón y vida, estas tres cositas nada más te doy. Porque no tengo fortuna estas tres cosas te ofrezco, alma, corazón y vida, y nada más. Alma para conquistarte, corazón para quererte y vida para vivirla junto a ti. Alma para conquistarte, corazón para quererte y vida para vivirla junto a ti. Vamos amarraditos los dos, espumas y terciopelo, yo con mi recrujiente almidón, y tu serio y altanero, la gente nos mira con envidia por la calle, murmuran las vecinas, los amigos y el alcalde. Dicen que no se estila ya más ni mi peinetón, ni mi pasador, dicen que no se estila ya más ni mi medallón ni mi cinturón, yo se que se estilan mis ojazos y mi orgullo, cuando voy de tu brazo por el sol y sin apuro. Paseando en tu jardín, mil mariposas, comenzaron a decir cosas hermosas. La más bella de las mil besó una rosa y después fué hacia tí maravillosa. Dime si tú, hoy, quieres bailar con el son del vals de las mariposas conmigo. Quiero bailar, si, quiero bailar corazón de el vals de las mariposas contigo. La la la la la la.............