SE FUERZA LA MAQUINA Este género divino, esta música excelente, que es la música del pueblo con la que baila la gente. Tiene un gran problema amigo, tiene un serio inconveniente: exige tantas energías que la salud se nos resiente. Es la rumba y es el tango, son el jazz y el rock'n roll un boyar de sentimientos por donde habla el corazón. Así se gasta adrenalina y se bebe mucho alcohol para afinar las emociones y acordarse del dolor. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Si el cantante va cargado, casi expresa lo que siente, si va fresco canta triste y no conecta con la gente. Melodías eternas encadenan la armonía, cuando el músico es sincero toca trozos de su vida. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Cuando el público se vuelca y se prende a las canciones, una magia misteriosa se apodera de la gente. Música, música, música, música y palabras, que se combinan en un diálogo inédito y profundo. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida. Se fuerza la máquina de noche y de día y el cantante con los músicos se juegan la vida.